
RESTYLING SIN OBRAS
Hoy es quiero hablar del restyling.
No es más que una “actualización” de la imagen de la marca o negocio, lo que los usuarios ven, adaptándose a los nuevos gustos y tendencias del mercado pero manteniendo siempre su propia identidad.
Esta actualización si se aplica en el ámbito del interiorismo de negocios como restaurantes, hoteles y oficinas, es una herramienta muy poderosa.
Pero, si os digo que aparte de conseguir esta transformación de imagen lo pudiéramos hacer “sin hacer obras”; la cosa cambia, ya que, repercute directamente en tiempos y costes de inversión de los negocios.
¿Esto ya se vuelve más interesante, verdad?
Hay aspectos que si se mezclan bien, son como un buen coctel.
A veces cada ingrediente por si solo no aportan mucho, pero juntos crean un nuevo sabor. Pues en un resyling interior pasa algo similar, si combinamos una buena iluminación, un mobiliario seleccionado, unos materiales concretos y una paleta cromática adecuada, conseguimos la transformación con el mínimo de polvo posible.
Eso sí, a nosotros nos gusta ensuciarnos los zapatos en la obra porque es cuando pasan cosas de verdad.